Santo Domingo, República Dominicana – El superintendente de Valores, Gabriel Castro, tiene razones más que suficientes para celebrar el desempeño que ha registrado este sector durante los últimos años. Los números son elocuentes: todas las variables importantes han avanzado a un ritmo que apuntan a un proceso de madurez del mercado de valores dominicano. Por supuesto, admite, la nueva legislación dará la profundidad necesaria para garantizar su fortalecimiento y un mayor dinamismo en el tiempo.
El funcionario calificó de espectacular el desempeño del mercado de valores durante los últimos cuatro o cinco años, lo que se demuestra con el crecimiento de dos dígitos en todas las variables, incluyendo casos sobre el 40%.
Explicó que el número de cuentas registradas en el Depósito Centralizado de Valores (Cevaldom), que es uno de los principales indicadores del mercado, pasó de aproximadamente 15,000 en finales de 2012 a más de 71,000, lo que significa un crecimiento exponencial de alrededor de un 400%.
“Esto nos indica que cada vez más personas, tanto físicas como jurídicas, participan del mercado de valores. Estimamos que en un par de años estará sobre las 100,000 cuentas. Evidentemente que para una economía como la nuestra es un número importante. No nos podemos comparar con mercados como el de Estados Unidos, donde cerca del 36% de la población participa de manera directa o indirecta”, expresó.
Destacó que muchas de esas cuentas se mantienen activas a través de transacciones en el mercado secundario. De hecho, apuntó, se refleja en el nivel transaccional. Resaltó que sólo en 2016 se transaron alrededor de US$40,000 millones, que es más del 50% del producto interno bruto (PIB). Dijo que ya prácticamente todo el déficit del Gobierno se financia a través del mercado de valores.
A su entender, el mercado de valores ha tomado una principalía que ya es irreversible. Además, indicó, el impulso se debe a que la economía dominicana tiene suficientes ahorros, especialmente a través de los fondos de pensiones, los cuales acumulan algo más de US$10,000 millones.
“La única queja que tenemos, y lo hablo como superintendente y como ciudadano de este país, es que esos fondos no están canalizándose justamente hacia proyectos de desarrollo, por lo menos en una proporción importante. Igual van a financiar parte del déficit público o a Tesorería, pero el otro paso trascendente es que los fondos puedan financiar proyectos importantes de desarrollo. De esta manera se crearía, lo que llamamos, un círculo virtuoso, pues habrá mayores rendimientos, pero por otro lado más aportantes”, apuntó.
Refirió que cuando se financia un acueducto, una presa o una carretera son obras que generarán empleos directos e indirectos, que al mismo tiempo se convierten en cotizantes del sistema. Pero lo más importante, según el funcionario, es que se diversifican los riesgos.
Castro señaló que hace unos años quizá no existían los vehículos financieros adecuados, pero hoy es totalmente diferente con los fideicomisos, administradoras de fondos y un gobierno que se ha ejercitado en el uso de recursos del mercado de valores con el pago religioso de sus compromisos financieros. “Esta es la mayor fuente de credibilidad (para el Gobierno)”, sostuvo.
Mientras destaca el dominio del Gobierno en el mercado de valores, con una ponderación cercana al 94%, Castro señaló que en economías como la dominicana es normal. Refirió que en Colombia la relación es 90-10.
Indicó que en estos momentos en el mercado se habla sólo de renta fija, con excepción de una proporción mínima de renta variable a través de los fondos de inversión con las cuotas, pero “con la nueva ley de valores entiendo que se crearán las condiciones para que más emisores de renta variable puedan acudir al mercado”.
Identifica una traba en las transacciones de acciones por causa de una norma que tiene la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) en lo referente a la ganancia de capital. Entiende que debe ser derogada porque sin eso es imposible que un mercado que día a día puede transar miles y miles de acciones esté sujeto a esta normativa, pues no se sabe sobre quién caerá el pago del gravamen.
En este sentido, consideró necesario la creación de un mecanismo claro y transparente para que se pueda desarrollar esa parte del mercado de valores, que es, a decir del superintendente, el futuro del sector y para la financiación de muchos proyectos.
Castro afirmó que el Estado será al que posiblemente le corresponda dar el primer paso. Puso de ejemplo a Punta Catalina, proyecto el cual se adelantó mucho el proceso. Dijo que una vez la termoeléctrica está en ejecución es perfectamente factible para iniciar el mercado de renta variable. Consideró que todo el holding de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) puede ser objeto de renta variable.
El superintendente de Valores también refirió que está pendiente que las asociaciones de ahorros y préstamos se conviertan en bancos múltiples, por lo que parte de su capital puede ser convertido en acciones y transarse en el mercado de renta variable. Indicó que se puede porque los depositantes son potenciales accionistas, pues ahora mismo son dueños bajo el esquema en que funcionan estas entidades financieras.
De suceder, estimó, se le dará mayor profundidad al mercado de valores. Su afirmación es porque si un ciudadano tiene RD$100,000 en ahorro lo podrá convertir en acciones y luego ir al mercado y transarla. Además, sostuvo, se podrá ampliar la cultura en términos de la inclusión financiera.
Transparencia
El superintendente de Valores destacó que la variable transparencia está segura, ya que es uno de los fuertes de este mercado. “Esto y que la información sea oportuna, veraz y a tiempo, son fundamentales”, apuntó.
Castro dijo que una futura reforma fiscal vendría a fortalecer el proceso de inclusión, porque si se fortalecen los procesos de transparencia eso coadyuvará con un fortalecimiento del mercado de renta variable. Igualmente, consideró, las nuevas generaciones que manejan ahora las empresas familiares tienen una idea más clara de la importancia de financiarse a través del mercado de valores.
Madurez del mercado de valores dominicano
Castro expresó que todo es un proceso y la madurez del mercado no está exenta de serlo. Dijo que si se compara lo que ha sucedido en los últimos diez años se podrá verificar que ha habido avances importantes. En ese orden, consideró que la nueva ley será el elemento central de cara al futuro sobre la cual se apoyará el proceso de madurez.
En el aspecto institucional la Superintendencia de Valores será mucho más fuerte y tendrá más herramientas para supervisar y regular el comportamiento del mercado. Además, indicó que habrá un Consejo Nacional de Valores más independiente acorde con las nuevas tendencias de gobierno corporativo. En el nuevo marco legal, sostuvo, la entidad tendrá mayor fortaleza financiera que le permitirá la contratación de mejores técnicos y dotación tecnológica, así como capacitación permanente.
Indicó que la ley en vigor, la 19-00, está enfocada a regular fundamentalmente el mercado primario. Sin embargo, indicó, cuando se analiza la composición, cerca del 92% de las transacciones se realizan en el mercado secundario, mientras que apenas un 8% en el primario. “Evidentemente que aquí hay que revertir la tendencia, que la ley sea mucho más fuerte para regular el mercado secundario porque es donde se hacen la mayoría de las transacciones”, sostuvo.
Proveedoras de precios
Se pretende, a partir de las nuevas experiencias, generar curvas de precios, según explicó Castro. Reveló que ahora los datos no están tan al día. Se busca, con este mecanismo, que los compradores tengan disponible al instante el dato de cuánto cuesta un título o una acción. “Ya hemos aprobado las proveedoras de precios”, apuntó.
Castro refirió que el proyecto de la nueva ley de valores fue aprobado recientemente en el Senado. Sin embargo, dijo que fue sometido hace más de un año. En ese orden, destacó que se le dará mayor prioridad porque es fundamental para el proceso de evaluación que tendrá el país con Grupo Acción Financiera (GAFI). Estimó que entre septiembre y octubre ya estará aprobada la nueva legislación.
Mercado extrabursátil
El superintendente de Valores, Gabriel Castro, consideró que el mercado extrabursátil se impone porque es el que le da mayor profundidad al sector. Indicó que en un momento determinado alguien compra un título y llega un momento en que se transa hacia adelante.
ovilidad al mercado. Esto no sólo es aquí, es una característica de todos los mercados de valores del mundo. No es una novedad. Esto sólo tiene que ver con la rotación, nada que ver con tasas”, dijo.
Respecto al proceso de transparencia, Castro dijo que con la nueva ley lo que se logrará es profundizar la fiscalización. Lejos de Delta Intur, señaló, el mercado no ha tenido dificultades. Señaló que todo está reglamentado.
Fuente: Periódico El Dinero | Autor: Jairon Severino